Saint-Léger-de-Montbrillais

En lo alto de una colina, el pueblo de Saint-Léger-de-Montbrillais domina viñedos y bodegas. Los dólmenes de Fontaine de Son son testimonio de la ocupación humana en el Neolítico. Hacia 1066, se menciona «Mons Sancti Leodegarii», seguido del nombre de un castillo, «la Roche Rabasté». Al final, se conservó la combinación del nombre del santo epónimo, «Saint Léger», y Montbrillais, el pueblo más importante hasta el siglo XIX. Admire la iglesia románica, declarada Monumento Histórico desde 1926, con su notable portal con tres vossuras historiadas y ricamente decorado con capiteles esculpidos. Pasee por la ruta de los viñedos, donde la diversidad del terruño vitícola y los encuentros con apasionados viticultores le revelarán que sí, que la viticultura es el alma de este municipio.